20.7.06

CARTA DE UNA DESCONOCIDA




Hace unos meses volvía a ver CARTA DE UNA DESCONOCIDA protagonizada por Joan Fontaine y el guapísimo y arrebatador Louis Jourdan y dirigida por Max Ophuls. Tenía un recuerdo ligeramente meloso de la película pero aún así decidí verla de nuevo. Las experiencias, (la juventud acumulada que me dijo un médico hace poco, por no decir crudamente los años) te permiten valorar y juzgar con otros ojos esas historias preñadas de unos sentimientos y pasiones tan vehementes que te parecen excesivos, exagerados. Esta vez, la película se me presentó de forma diferente, me zambullí en ella y lloré por lo que a veces nos perdemos. Me entró curiosidad por la historia. ¿Cómo sería la novela en la que está basada la película?
Después de esto, me enteré de que el Arriaga programaba La Cena montaje dirigido y coprotagonizado por Josep María Flotats. Después de haber seguido un poco su trayectoria, tan leal a sí mismo y haber leído tanto sobre sus éxitos, reconocidos sobre todo en Francia donde lo nombraron "societaire" de la Comédie Française, no podía escapar la oportunidad de ver la obra. Fouché es uno de los personajes de la misma, político francés tremendamente habilidoso sobre el que Stefan Zweig escribió una obra titulada Fouché, retrato de un hombre político.
Mi interés por el autor de Carta de una desconocidad iba creciendo y hace unos días compré la mencionada novelita de Stefan Zweig con un título igual que la película (el original es “Brief einer Unbekannten”). Novela brevísima pues en realidad es la carta que recibe un afamado escritor, un seductor y adorable "donjuan", de una mujer que lo ha amado desde que se tiene la capacida y consciencia de amar. Esa larga carta explicando lo que ha significado él en su vida, sin acritud, sin rencor, en unos momentos en que ya nada importa pues acaba de morir su hijo, el hijo de ambos, cuya existencia el escritor desconocía; ya nada importa porque ella también se ve próxima a la muerte. Una carta que busca, al menos, el homenaje póstumo a ese amor. Es interesante aunque nuestro principio de realidad nos impida vivir una historia así, cuasi patológica. Merece la pena leer ese texto femenino escrito por un hombre que parece conocer bien lo que quiere mostrar.
Hay también una versión realizada recientemente por una directora china llamada Xu Jinglei pero no he tenido la oportunidad de ver cómo se adapta a otro tiempo y en un ambiente oriental una pasión tan decimonónica
La misma novela de Stephan Zweig fue adaptada para el cine mexicano por Julio Alejandro y dirigida en 1955 por Tulio Demicheli. Se tituló "Feliz año, amor mío".