CEREBRO, MENTE
En septiembre paseaba por Barcelona, comentaba con mi acompañante el libro que estaba leyendo esos días “El error de Descartes”. Ayer asistí a una conferencia del autor, el portugués Antonio Damasio organizada por Ikerbasque. Eché de menos no poder compartir la conferencia con quien compartí aquella charla barcelonesa.
Carlos Matute nos presentó los muchos méritos del conferenciante.
Antonio Damasio nos explicó con amenidad cómo la empresa que nos debe ocupar ahora es la de entender cómo interviene el cerebro en la construcción del andamiaje de nuestros sistemas morales, sociales, económicos, políticos, etc.. Tenemos actualmente medios que posibilitan y posibilitarán investigaciones fascinantes
Se derriba la creencia de que los hemisferios funcionan con competencias perfectamente divididas. Bien cierto es que en el hemisferio izquierdo se coordinan funciones del lenguaje; que el derecho controla la razón deductiva, que está relacionado con crear un espacio interior y tomar conciencia de lo que nos rodea y la emoción está liderada por el derecho. Pero todas estas funciones no están estrictamente separadas y ambos tienen áreas que participan de todas las funciones. O sea el lenguaje perfectamente el hemisferio izquierdo pero la emoción, la melodía, la música el derecho. No hay separación total sino preferencia
Nos explicó cómo se localizan las emociones y los sentimientos. Las emociones, esos programas de acción relacionadas con la homeostasis, un programa que nos permite actuar de manera rápida, sin tener que pensarlo, es un automatismo. Automatismos que también tienen otras especies. Los sentimientos que te permiten percibir tu cuerpo ante esas emociones, que hacen una valoración de lo que sentimos.
Nos mostró fotos, imágenes escaneadas de cerebros en activo con las zonas implicadas en diferentes emociones. Sospechábamos las posibilidades terapéuticas que esto abre
En cuanto a las emociones sociales, compasión, envidia, vergüenza, culpa, admiración, envidia, celos,… que sustentan nuestros sistemas sociales; se pensaban que no tenían base biológica y ahora sabemos que no es así y que los primates también tienen un repertorio básico de emociones.
La emoción juega un papel primordial en la toma de decisiones. El daño en la zona prefrontal no afecta a funciones lógicas, el individuo podrá seguir tomando decisiones pero la decisión es un conjunto de análisis racional, de manejo de datos y además un prisma emocional que da una luz particular a lo anterior. Los individuos con daños en la zona prefrontral han perdido el patrón emocional y dejan de ser efectivos o de tomar decisiones adecuadas
Al finalizar preguntas también muy interesantes, ¿Es la intuición un valor femenino? ¿Podemos estudiar ahora los patrones emocionales de nuestros antepasados? Hacer mapas del cerebro está bien pero el cerebro es un órgano plástico ¿hasta qué punto?
3 Comments:
¡Menos mal que pensabas que no tenías nada que decir o trasmitir!
No creo que la intuición sea un valor femenino. Sí creo que hay una componente educativa por detrás muy grande y que ha calado quizás, en un inconsciente colectivo que va cambiando.
2:44 p. m.
Estoy de acuerdo contigo. ¿Será la intuición un valor a reivindicar?
Dejaos guiar por vuestra intuición
8:07 p. m.
Muy interesante. Sobre todo para los que tenemos cerebritos que ir ordenando poco a poco.
8:46 a. m.
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